Viernes 21 y sábado 22 de junio
El XXII Memorial Miguel Vargas, se celebrará durante los días 21 y 22 de junio con motivo del aniversario del fallecimiento del cantaor, de cuya desaparición se cumplen 22 años el próximo 26 de junio. Lo organiza la Peña Cultural Flamenca "Miguel Vargas" en colaboración con el Ayuntamiento de Paradas.
El viernes 21 de junio a las 7 de la tarde se realizará una ofrenda floral en el Cementerio
Municipal de San Antonio ante la tumba de Miguel Vargas. A las 9:30 de la noche en el Aula Municipal
de Cultura "La Comarcal" tendrá lugar una conferencia titulada "Miguel Vargas y la época de los
festivales flamencos" a cargo de Eduardo J. Pastor para continuar con un recital con el cante de
Manuel Castulo con el toque de Joselito de Pura.
El sábado 22 de junio , a las 9:30 de la noche de nuevo en el Aula Municipal de Cultura "La Comarcal", tendrá lugar la conferencia de Pablo Parrilla titulada "Las guitarras de acompañamiento de Miguel Vargas". El recital estará a cargo de José Canela con el toque de Pepe del Morao.
El cantaor Miguel Vargas murió a las diez de la mañana del 26 de junio de 1997 a los 55 años de edad. La grave enfermedad de Miguel Vargas fue una sorpresa para cuantos vivían a su alrededor. Cantaor serio, respetado, hombre muy querido por cuantos le conocían, la noticia de su fallecimiento causó enorme impresión a la afición flamenca.
Miguel Rubio Vargas nació en La Puebla de Cazalla, a no muchos kilómetros de Paradas. Miguel creció en el campo, entregado desde niño a las ásperas faenas propias de la tierra. Apenas adolescente se vino a vivir a Paradas, donde se hizo querer y fue adoptado como uno más del pueblo. En los últimos años se le consideraba una personalidad representativa del lugar. Sin antecedentes cantaores en su familia, lo suyo fue un caso de vocación. A él nadie le enseñó los cantes, los aprendió porque sí, porque sintió la imperiosa necesidad de cantar. Y así se forjó uno de esos cantaores que afrontan lo jondo dándole a este arte la máxima dignidad.
En sus primeros años de profesional estuvo en Madrid, en el tablao Zambra, donde adquirió
experiencia al lado de cantaores de la talla de Rafael Romero, Pericón, Juan Varea, Manuel Vargas,
Pepe el Culata... Siguió siempre la buena senda, la de maestros como Mairena y consejeros como
Francisco Moreno Galván. Todo lo que ofreció en el cante Miguel Vargas, tuvo siempre un propósito
enriquecedor, resultando de una gran belleza y a veces de una rara perfección.